dijous, 3 de juny del 2010

Highschool Bizarre Chronicles Capítulo 4 (II)

Mary Sue había decidido, después de largas horas de calibraciones y muñecas voladoras, que lo mejor que podía hacer para acercarse a Nick, y ya de paso obtener algo de información, era empezar a llevarse bien con sus mejores amigos. Y, casualmente, había oído parte de la conversación anterior, descubriendo que Doris era fan de Lirios en Diciembre, cosa que le había dado una ligera idea de cómo hacer que la chica se pusiera de su parte.
Pero todo a su tiempo, se dijo. Primero era mejor andarse con rodeos.
- ¿Has visto a Nick hoy? – le preguntó, muy sonriente.
- No, ni ganas. Supongo que llegará tarde, para variar –respondió Doris, con terquedad. No entendía hasta dónde quería llegar Mary Sue.
- Vaya. ¿Y a Alexander?
- Tampoco. Quizás se haya caído por una zanja viniendo hacia aquí –Al solía llegar temprano, recordó Doris mientras sacaba un paquete de gominolas y empezaba a devorarlas. Tenían forma de gatito, y ella disfrutaba arrancándoles la cabeza antes de comerse al resto del cuerpo.
La mirada de Mary Sue se volvió extrañamente brillante.
- ¿Estás preocupada por él?
A Doris casi le salieron los gatitos por la nariz.
- ¿¡Qué!? Es decir, ¡¡no!!
Mary Sue la miró emocionada.
- ¿Hay algo entre tú y Al?
Los ojos de Doris no reflejaron nada, pero dentro de su cabeza estaba teniendo lugar una compleja ecuación: la velocidad a la que alcanzara el extintor de la pared era directamente proporcional al tiempo que tendría la Princesita para huir antes de que Doris se lo estampara en la cabeza, e inversamente proporcional al margen de maniobra que le quedaría para lanzárselo y marcharse corriendo mientras se tapaba la cara con la camiseta.
Su mirada topó con el único extintor del pasillo, a unos diez metros de dónde se encontraban conversando. Mala suerte.
- Odio. Puro odio –respondió finalmente, dejando su plan homicida para otro día.
- Ah – ¿Eran imaginaciones suyas, o Mary Sue parecía ligeramente decepcionada? De todas formas, se repuso rápidamente. - ¡Cómo sea! ¿Qué te parece si esta tarde quedamos todos para ir a tomar algo?
Doris lo pensó uno coma seis nanosegundos.
- No.
- ¡Invito yo!
- Que no.
Mary Sue frunció el ceño, pero sólo un poquito, lo suficiente porque su dulce rostro no se viera excesivamente perjudicado. Se había acabado andarse con rositas.
- Pues es una pena que no quieras hacer nada, porque conozco a un local muy bueno… Y además, había pensado en invitar a mis amigos de Rosefield, para que os conocieran. ¡Les he hablado mucho de vosotros!
- ¿Tú no venías de París?
- Oui, claro, pero no fui a parar aquí directamente –le anunció con una risita.- Antes estuve un tiempo viviendo en Rosefield. Ay, es un lugar tan bonito…
Ciertamente, lo era. Rosefield era la ciudad vecina de Backshead, y era un lugar acogedor y limpio, con tasas de delincuencia más bien tirando a bajas e instituciones decentes. Era por eso que la mayoría de edificios importantes y centros sociales estaban situados en Rosefield. A los habitantes de Backshead no les importaba demasiado, ya que sólo les quedaba entre diez y quince minutos de distancia.
- Pues es una pena, porque estoy segura que tenías un montón de amigos ahí –dijo Doris intentando sonar sarcástica, pero al recordar que la mayoría de chicos babeaban por Mary Sue se dio cuenta que probablemente esa era la realidad.- Pero no vamos a venir. Bueno, si quieres, secuestra a Nick, pero eso ya es asunto tuyo.
- Sí –siguió Mary Sue como si no la hubiera oído.- Además, la mayoría de mis amigos trabajaban mucho, pero siempre encontraban un rato para estar conmigo. Por eso los quiero tanto…
- ¿Trabajaban mucho? – Doris sabía que Rosefield era una ciudad de pijos. ¿Cómo iban los estudiantes a trabajar, si la mayoría eran mantenidos por sus padres?
- Ahá. Ya sabes, modelos, actores juveniles… Como había un estudio cerca, a la mayoría les fichaban para series, sesiones de fotos o programas. A mí misma me propusieron hacer un par de películas, oferta que tuve que declinar porque…
Pero Doris ya no escuchaba. Su mente repetía una sola frase una y otra vez.
- ¿Has dicho… actores?
- ¡Oui! La mayoría estaban en una serie llamada… ¡Ay! ¡Qué tonta! ¡Ahora no me acuerdo del nombre! Era algo de unas flores… y diciembre, ¡sí!
KILLER MODE-OFF
Doris se quedó mirando un punto fijo del pasillo, intentando asimilar la información, mientras Mary Sue se alejaba con una sonrisa de oreja a oreja y el móvil en la mano. “Ya falta poco, mi querido Nicky”, pensó sonrojándose.
El teléfono dejó de dar pitidos, y una voz medio adormilada respondió des de la otra línea.
- Hola, chèrie, soy yo. ¿Te acuerdas del favor que me debes? Pues escucha con atención…

1 comentari:

  1. OOH!! ♥
    la Mary Sue és tan, tan, tan malvadota! jajaja!
    allò d'arrancar-los el cap a les 'gominoles': genial!
    oh, i allò de l'extintor....aiiix♥
    que cabroneta no la MS?
    espero que en Nick estigui a salvoo, sigui on sigui que s'amagui!
    i que deuen fer en Nick i l'Al? :S:S
    petons nina!(KK)

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